A tan solo 35 kms de Los Ángeles esta isla es toda una joya biológica que, con el paso del tiempo, llegó a convertirse en el refugio favorito para estrellas como Charles Chaplin o Marilyn Monroe, cuando buscaban escaparse de la ajetreada vida de la urbe.
Santa Catalina ha estado muy vinculada al mundo del cine, y gran parte de su popularidad se la debe a la gran pantalla. Allí se filmaron más de 300 películas en el último siglo. Sus paisajes y relieve la convirtieron en un lujo para la filmación de exteriores en producciones de Hollywood.
Recorriendo su lado más natural pueden encontrarse caminos escarpados, playas cristalinas o incluso admirar a búfalos recorriendo la isla… Y es que estos animales fueron llevados como parte de la producción de una película llamada “The Vanishing America” en 1924 y nunca los reubicaron después. Se fueron reproduciendo y ahora hay una población considerable en el lugar, así que no debe sorprenderte si te cruzas con alguno de ellos en cualquier esquina de la isla, pues es de lo más habitual.
Esta isla es uno de los destinos favoritos y más frecuentados por los californianos gracias a su cercanía, a la enorme oferta de actividades al aire libre, a su vida nocturna y, especialmente a que los coches están prohibidos ¡Me encanta este lugar especialmente por esto! Imagina el primer rincón de California donde han logrado regular la cantidad de emisiones y ruidos de sus vehículos. Si te quieres ir a vivir ahí, tienes que olvidarte de ir motorizado pues tienen ¡una lista de espera de 20 años para poder llevar tu coche a la isla! Sin embargo, además de caminar, siempre tendrás opciones alternativas como permisos para conducir y alquilar carritos de golf y otros pequeños vehículos de lo más divertido para visitar la isla...
¡Toda una experiencia que no debes perderte! ;)
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